
POR:
MIGUEL GONZÁLEZ GRANIEL
El crecimiento del estado trae consigo una generación de jóvenes emprendedores, dispuestos a mirar en la cara a la competencia y alzar la mano para tomar la batuta en nuevo mercado competitivo y sanguinario.
Los artilugios malignos de los gurús publicitarios de antaño, se ven remplazados por una bocanada de aire fresco necesaria para el desarrollo intelectual del país.
Con su página http://www.ombligo.com.mx/, Gerardo Guerrero Sánchez y David Ramírez Novelo, mejor conocidos en el bajo mundo como el Dona y el Compaye (y no, no son narcos), entran de lleno al competitivo mercado del diseño y la comunicación con su Crema para quitar lo feo (no es mentira, realmente encontraron la cura a tan viciosa enfermedad, de veritas).
La crema para quitar lo feo es un servicio íntegro de diseño de imagen corporativa, que permite hasta el más infortunado ser del planeta vivir la historia del patito feo, en 3d y diseño flash claro.
En sí, la página sigue una tendencia de diseñadores jóvenes, en donde la irreverencia y la transmisión de nuevos valores creativos, fundamentada con un bagaje educativo y técnico, fusionan elementos artísticos modernos de la cultura globalizada.
La relevancia de estos proyectos, se debe a la conciencia que se desarrolla en la mente de este tipo de personajes, que entienden que solo a través de la creación de valor agregado se puede sobrevivir como empresa.
En cifras concretas, encontramos que de acuerdo al censo en 1999 del INEGI, 96% de las empresas son Micro, y 98% son MIPYME's, sin embargo según la subsecretaría para la pequeña y mediana empresa de la secretaría de economía, las MIPYME's constituyen el 52% del PIB nacional y el 72% del empleo.
Es por eso que esfuerzos como estos se traducen directamente en un incremento en el empleo y competitividad que tanta falta le hacen al país.
Yo no se ustedes, pero si creen que su empresa ya necesita una manita de gato, prueben esta crema para quitar lo feo. Se los recomiendo.
La receta no es una, las opciones son muchas, lo único que se necesita es echarle huevos al caldo y al avión.
Cheers